jueves, 30 de marzo de 2017

Mujeres vs Hombres

Por qué pierden los hombres peso con mayor facilidad que las mujeres? ¿Es un mito o realmente las mujeres lo tienen más complicado?


Según UGT, las mujeres tendrían que trabajar 82 días más que los hombres para ganar la misma cantidad de dinero. De los 350 diputados de la cámara baja, 131 son mujeres. Es decir: el género femenino representa el 37,4%. Los hombres ocupan el 73% de los cargos directivos en medios de comunicación globales. De acuerdo, la desigualdad de género es evidente, pero ¿tiene también cabida en el gimnasio? ¿Es cierto que los hombres pierden peso con mayor facilidad que las mujeres? ¿Es un mito o realmente las mujeres lo tienen más complicado para lograr resultados óptimos sobre la báscula?
Mujeres del mundo, aquí tienen un pequeño adelanto: existe una desigualdad patente, pero también una solución.
Un estudio realizado por la Universidad de Missouri sometió a un grupo de hombres y mujeres a hacer una misma tabla de ejercicios. El resultado fue mucho más favorable para ellos que para ellas, y la conclusión de la investigación fue que las mujeres necesitan hacer un 20% más de ejercicio que los hombres para conseguir los mismos resultados. Si usted es una lectora, no se desanime todavía, porque aún hay una pregunta esencial que plantear antes de caer presas del pesimismo. ¿Realmente es conveniente someter a la misma tabla de entrenamiento a hombres y mujeres? ¿Acaso no radica el problema en que no podemos esperar resultados exactos al someter a un entrenamiento exacto a dos géneros diferentes?

Natalia Honorato, nutricionista del gabinete de salud Gabriel G. Calderón, nos explica cómo las hormonas inciden en que las mujeres tengamos más dificultades para perder peso. "El estrógeno crea un aumento de depósitos grasos en caderas y muslos. La testosterona, 10-20 veces mayor en los hombres, les dota de una mayor masa muscular y de mayores niveles de fuerza. Las mujeres contamos con los cambios hormonales, y el desarrollo del ciclo menstrual genera cambios en nuestro organismo que pueden provocar una mayor o menor capacidad para el ejercicio físico. Los estrógenos son hormonas con un perfil anabolizante, hacen aumentar la capacidad para asimilar cargas de entrenamiento superiores y mejorar la capacidad del rendimiento deportivo (etapa premenstrual). La progesterona induce el aumento de frecuencia cardiaca, por lo que puede disminuir la capacidad para realizar ejercicio (en la etapa menstrual)".
Isabel del Barrio coincide en señalar la importancia que las hormonas tienen a la hora de señalar los resultados de nuestra rutina de entrenamiento. No solo no cree que sea un mito el que las mujeres lo tengan más complicado, sino que habla de otro mito que es culpable de que así sea. "Si solo haces ejercicio cardiovascular, no vas a adelgazar. Cuanta más masa muscular tengas, más energía demandará tu cuerpo en estado de resposo. Es esencial trabajar la fuerza. No vas a ponerte 'cachas', que es uno de los mayores miedos de las mujeres, y al trabajar el músculo, transferimos esa fuerza a los huesos. De esta forma, los huesos generan más masa ósea, cuya producción se ralentiza a partir de los 30". 
También hay que tener en cuenta que el gasto metabólico basal (establece las necesidades energéticas mínimas para el mantenimiento de la temperatura corporal y el funcionamiento de órganos internos) es menor en mujeres que en el hombre. El metabolismo basal es un 10% superior en hombres que en mujeres. Por ejemplo, el de una mujer joven sería un gasto medio de 1.300 kilocalorías diarias y el de un hombre, 1.700 kilocalorias al día. Cuanta mayor masa magra, más gasto energético. Una mujer de 55 kg, con actividad moderadamente activa, puede consumir entre 580-980 kcal durante actividades recreativas, y un hombre tipo 65 kg, al realizar la misma actividad, podría quemar entre 700-1500 kcal", aclara Natalia Honorato. 
Entonces, ¿qué rutina puede seguir una mujer para luchar contra esta desventaja? "Lo que llamamos ejercicios de Alta Intensidad, que aumentan el metabolismo basal. Un error extendido es que las mujeres tienen que hacer muchas repeticiones con poco peso. Es un trabajo de fuerza básica, si quieres tener objetivos, has de subir la carga y trabajar con menos repeticiones. Está demostrado que el entrenamiento de fuerza es el más efectivo. Hay que trabajar con cargas progresivas. Es importante cambiar las rutinas, porque si el cuerpo se adapta, puedes sufrir un efecto rebote. Hablamos del principio de sobrecarga progresiva", explica David Pozos.
La siguiente vez que vaya al gimnasio, pida una tabla personalizada a sus necesidades, pierda el miedo a los ejercicios de fuerza y recuerde que no podemos cambiar la biología, pero sí nuestro entrenamiento. Y es ahí, querida lectora, donde radica la clave del éxito para lograr los mismos resultados que los hombres en el gimnasio.

1 comentario:

  1. Muchas gracias Rodrigo,no eres un "chico diez" sino "chico de matricula",cada día me gusta más tus publicaciones.
    Saludos

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